La pesca artesanal en Tolú es una actividad ancestral que forma parte de la vida y la identidad de la comunidad. Los pescadores locales han desarrollado un profundo conocimiento del mar y sus ciclos naturales, lo que les permite aprovechar los recursos marinos de manera sostenible y en armonía con el entorno.
La interpretación de las condiciones del mar es fundamental para los pescadores, ya que les permite determinar los momentos adecuados para salir a pescar y capturar las especies deseadas. Observan los regímenes de vientos, las mareas, las épocas de lluvia y las fases de la luna para obtener información clave sobre la actividad marina. Este conocimiento tradicional ha sido transmitido de generación en generación, permitiendo a los pescadores adaptarse a las cambiantes condiciones del mar.
La marea es uno de los elementos fundamentales que se analiza para la pesca. Los pescadores observan la luna y la altura de las olas para determinar si las condiciones son propicias. Buscan brisas suaves, ya que si los vientos son fuertes, puede resultar peligroso o dificultar la pesca. Esta sabiduría local les permite optimizar sus esfuerzos y obtener mejores resultados en sus capturas.
La pesca se lleva a cabo utilizando técnicas artesanales, como el uso de cordel o trasmallo. Estos métodos permiten capturar peces en mar abierto, en las ciénagas de manglar e incluso en las islas de San Bernardo. Los pescadores fabrican sus propias redes de pesca, utilizando habilidades transmitidas de generación en generación. Cuando estas redes se desgastan o se rompen, los pescadores las reparan ellos mismos, demostrando su destreza y conocimiento práctico.
Además, los botes utilizados en la pesca también son fabricados artesanalmente, a menudo utilizando madera. Los pescadores poseen habilidades en carpintería y construyen estas embarcaciones a mano, adaptándolas a las necesidades y características específicas de la pesca en la región.
La pesca artesanal en Tolú no solo es una forma de subsistencia, sino también una parte integral de la cultura y el patrimonio local. Los pescadores poseen un conocimiento profundo del mar y sus ciclos, lo que les permite realizar una pesca sostenible y respetuosa con el entorno. Su habilidad en la fabricación de redes y botes artesanales demuestra su destreza y adaptabilidad. Ellos son guardianes de tradiciones ancestrales y tienen un profundo respeto por el mar y sus recursos. Su labor desempeña un papel vital en la economía local y en el abastecimiento de alimentos frescos y nutritivos a la comunidad. La pesca artesanal no solo es una forma de subsistencia, sino también una expresión cultural y una parte esencial de la identidad de Tolú.
