En el municipio, el pescado frito es una delicia culinaria muy apreciada y se destaca por su frescura y sabor. La preparación del plato comienza con el lavado y desescamado del pescado, seguido de la remoción de las vísceras. Una vez listo, se fríe en aceite caliente hasta que esté dorado por ambos lados. Para facilitar su consumo, a menudo se realiza un corte en diagonal para cortar las espinas y permitir que se frían adecuadamente.
El pescado frito se sirve tradicionalmente con acompañamientos típicos de la región. Uno de ellos es el arroz de coco blanco, en el que el arroz se cocina con el delicioso sabor y aroma del coco. Los patacones, que son rebanadas de plátano verde fritas y aplastadas, agregan un toque crujiente al plato. Además, se sirve una refrescante ensalada de tomate con cebolla y lechuga para complementar los sabores.
Para acompañar esta deliciosa comida, se suele ofrecer agua de panela con limón, una bebida tradicional colombiana preparada a base de panela (un tipo de azúcar sólida) disuelta en agua caliente y luego enfriada con jugo de limón. Esta bebida agridulce es refrescante y combina perfectamente con el pescado frito.
En ocasiones especiales, se puede agregar al plato un poco de revoltillo de moncholo, otro tipo de pez de río que no es tan común en el mercado comercial, pero que es apreciado por su sabor y textura. Este revoltillo se prepara salteando el pescado con condimentos y otros ingredientes, lo que le da un toque adicional de sabor al plato principal.
El pescado frito es un plato icónico en el municipio, especialmente gracias a la pesca en el río Sinú y la ciénaga Grande del Bajo Sinú. Su preparación y presentación con los acompañamientos tradicionales reflejan la riqueza culinaria y cultural de la región, ofreciendo una experiencia gastronómica única para los residentes y visitantes.
