La pesca artesanal es una práctica ancestral que predomina en las costas Pacífica y Caribe de Colombia. Así mismo, es una actividad que es considerada como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación.
En San Antero, estas prácticas se remontan a los ancestros de los pescadores, quienes con su experiencia lograron comprender o leer los signos de la naturaleza a favor o en contra, como las mareas, las corrientes o las fases de la luna.
Para optimizar las actividades de pesca, los ancestros elaboraron artesanalmente atarrayas, trasmallos, botes de remos, palangres y otros artefactos de pesca. Recientemente se han sembrado arrecifes artificiales en el Golfo de Morrosquillo que permiten reducir los tiempos de duración de las faenas de pesca.