El islote El Ancón es un lugar de gran importancia para la biodiversidad y la conservación de aves marinas migratorias en San Bernardo del Viento. Se encuentra rodeado de bosques de manglar y ciénagas, que brindan un hábitat propicio para la anidación y alimentación de diversas especies.
Entre las aves marinas migratorias que encuentran refugio en el islote se destacan las garzas y los pelícanos, que forman colonias y utilizan los árboles de manglar como lugares de anidación. Estas aves migran desde diferentes partes del continente en busca de climas más favorables para reproducirse y alimentarse.
La presencia de estas aves en el islote El Ancón brinda una oportunidad única para la observación y el estudio de su comportamiento y ciclo de vida. Los investigadores y amantes de la avifauna pueden acercarse a la isla desde tierra firme y realizar estudios de campo, contribuyendo así al conocimiento y conservación de estas especies.
Además de la importancia como hábitat de aves marinas, el islote El Ancón también cuenta con un arrecife coralino cercano, que se puede observar durante la época de invierno. Este arrecife, con una extensión de aproximadamente una hectárea, es un valioso ecosistema marino que alberga una diversidad de especies y contribuye a la salud y equilibrio del ecosistema marino.
La conservación de estos entornos naturales, tanto los bosques de manglar como el arrecife coralino, es fundamental para preservar la biodiversidad marina y garantizar la continuidad de las especies que dependen de ellos. La protección de estas áreas y su estudio científico ayudan a promover la conciencia ambiental y la necesidad de conservar estos valiosos ecosistemas.
